Manifestación contra la Reforma Previsional en Monte.

El 19 de diciembre de 2017 realizamos un móvil en directo desde la Plaza Adolfo Alsina de San Miguel del Monte, donde vecinos se auto-convocaron para protestar contra la reforma previsional, aprobada el 19 de diciembre en la Cámara de Diputados.

Alrededor de 50 personas se concentraron en el anfiteatro de la plaza central de la ciudad, con carteles y cacerolas en descontento con la nueva reforma que establece una nueva fórmula para el cálculo de la actualización de las jubilaciones. A diferencia de la actual, que contempla principalmente la evolución de los salarios y de la recaudación de los recursos tributarios que recibe la Anses, la nueva está compuesta en una relación de 70/30 por la variación de precios (inflación) y el promedio de salarios de trabajadores en relación de dependencia.

Antonella, una de las manifestantes, remarcó que se habían reunido para “repudiar la Reforma que se aprobó esta mañana” que implica “quitarle los derechos obtenidos a los jubilados, que han sido muy vapuleados”, además añadió que “se los ha tratado de violentos por el simple hecho de querer reclamar por los derechos que fueron adquiridos, la reforma implica que se queden afuera un montón de personas para cobrar el 82% móvil, personas de más de 50 años tengan que seguir en el sistema trabajando; nosotros tenemos que salir por ellos, por aquellos que ayer salieron por nosotros” y sentenció: “Le sacan al más vulnerable, al más rico le dan todo”.

En respuesta a la consulta de Martín sobre lo que se puede hacer ahora, sabiendo que la reforma fue aprobada en Diputados, Antonella respondió que “lo que podemos hacer es repudiarlo, y los ciudadanos podemos salir a la calle, defender nuestros derechos, porque esto no solamente implica una reforma para los jubilados, también implica que metan la mano en el IPS, que es la caja a la cual van todas las jubilaciones de las personas que trabajamos para el Estado”.

La nueva fórmula se aplicará en marzo, junio, septiembre y diciembre. Se calcula con una combinación del 70% de la inflación y el 30% del Ripte, que es el aumento salarial de los trabajadores del sector formal. Busca que los aumentos se relacionen con la inflación en lugar de la recaudación.

En junio del 2018 las prestaciones aumentarán nuevamente, pero ese incremento se realizaría considerando la variación salarial y de la inflación entre octubre y diciembre de 2017 y no de enero a marzo 2018, que es lo que correspondería según la fórmula actual. Por lo tanto, las actualizaciones tendrán siempre un semestre de atraso y no habrá un factor de empalme.

Uno de los principales motivos del descontento de parte de la población para con la reforma tiene que ver con que el cambio en la fórmula de ajuste no resuelve el principal problema que tiene el actual sistema de jubilación de reparto que es garantizar el 82% móvil a todos los jubilados que cobran la mínima, ya que la Anses no cuenta con los fondos para hacerle frente a ese gasto.

La Cámara baja convirtió en ley la reforma de la fórmula de la actualización de las jubilaciones al cierre de doce horas de un debate agitado, con fuertes cruces e infructuosos llamados de la oposición para levantar la sesión. El Gobierno se alzó con la aprobación de la reforma luego de una jornada con incidentes y enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas de seguridad, cacerolazos en distintas locaciones y una multitud que se concentró en la Plaza Congreso.

Algunos datos obtenidos de las fuentes:
Infobae y La Nación.